Ya sea por trabajo, porque deseas vivir más cerca de tu familia o porque necesitas más espacio, tus motivos para mudarte son personales. Las profesiones y los empleos tienen mucha mayor movilidad que antes, y no tiene nada de raro escuchar que alguien se trasladará a una zona lejana del país a fin de buscar nuevas oportunidades. A lo mejor acabas de tener un bebé y necesitas esa habitación adicional o quizá solo estés buscando empezar de nuevo en un vecindario distinto. Cualquiera que sea la situación que te esté obligando a mudarte, ¿qué significa eso para tu actual sistema de seguridad del hogar?
Los sistemas portátiles de alarma sí existen y, en muchos casos, es posible que el sistema de seguridad de tu hogar pueda mudarse contigo. Sin embargo, a cuestión de si puedes, o no, llevar contigo tu sistema existente, depende plenamente de la compañía. Esta guía puede ayudarte a determinar qué llevarte contigo al mudarte.
1. Consulta la política de mudanza de tu compañía de seguridad
Si puedes llevarte contigo tu sistema depende de la política de la compañía en lo relativo a mudanzas. No todas las compañías lo hacen fácil y es bien probable que deberás satisfacer ciertas estipulaciones en tu contrato, para que te liberen de obligaciones financieras adicionales. Si tu mudanza no satisface esos criterios, podrías ser responsable de pagar el remanente de tu contrato, aunque ya no estés utilizando más el equipo o los servicios de monitoreo.
2. Cerciórate de posibles cargos
Dependiendo de la compañía, puede que haya cargos asociados con la mudanza de tu sistema de seguridad portátil e inalámbrico. A veces esos cargos podrían ser tan bajos como de unos cuantos dólares por una nueva activación, o bien podrías tener que pagar un poco más por instalación profesional. Según mencionamos antes, en caso de que no cumplas con los criterios necesarios, bien podrías tener que pagar un cargo por cancelación temprana.
3. Considera cualquier equipo extra o adicional que podrías necesitar
Si te estás mudando a una vivienda más grande, con más espacio, podría suceder que tu viejo equipo no sea suficiente. Podrías necesitar un repetidor de WiFi para ampliar tu red a lo largo de la nueva área o a lo mejor podrías tener que invertir en una cámara de seguridad adicional y más sensores de movimiento.
Si esto luce como muchos gastos adicionales en los que incurrir cuando ya estás lidiando con el alto costo de una mudanza, no te preocupes, es posible que puedas conseguir financiamiento a través de tu proveedor. Por ejemplo, Xfinity Home ofrece un módico plan de pagos mensuales o un pago único por la totalidad del sistema, dependiendo de qué prefieran los clientes. También puedes invertir en piezas individuales de equipo que se ajusten a tus necesidades.
4. Valora cuál de tus equipos existentes podrías utilizar
Al mudarte a un nuevo lugar, podrías encontrarte con que ya tiene un panel de control de seguridad y otro equipo de seguridad en el hogar. De ser ese el caso, bien podrías integrar tu actual sistema con el equipo existente. También podrías prescindir de cargos de instalación y pagar, en cambio, un módico cargo de activación para asumir el control del equipo ya instalado en tu nuevo lugar. Solo asegúrate de que es compatible con el sistema de tu actual proveedor de seguridad en el hogar.
Mudarse a un nuevo domicilio es bastante costoso y no hay ninguna necesidad de agregar más costos, si puedes evitarlo. Antes de que comiences a empacar e inicies el proceso de mudar tu vida de un lugar a otro, determina si el sistema de seguridad de tu hogar puede mudarse contigo. Eso podría ahorrarte dinero en costos de equipo y cargos de instalación, una perspectiva agradable a medida que te instalas en tu nuevo hogar.
